Servirá para marcar una posición determinada frente al asunto por el que se solicitan firmas, más allá de eso, podrían (y es esencialmente importante el condicionante) utilizarse dichas firmas cuando conste fehacientemente la identidad de las personas firmantes, como mecanismo para plantear una proposición legislativa por iniciativa popular, cuando dichas firmas reúna los demás requisitos del artículo tercero de la Ley Orgánica 3/1984, reguladora de la iniciativa popular. 

Para todo lo demás, podrá servir como mecanismo para ejercer presión sin salir de la comodidad del hogar por aquellas que refrenden la iniciativa firmada, de lo contrario, podrían también ejercer presión en la forma constitucionalmente reconocida en su artículo 21 de nuestra Constitución y por ende, ejercer el derecho fundamental a manifestarse. 

Por otra parte, para aquellas que se encuentren fuera del Reino de España, el derecho a manifestarse deviene de los inalienables derechos naturales de la vida y la libertad, por lo que corresponden al Derecho de ius cogen, de obligado cumplimiento a nivel internacional.